miércoles, 21 de septiembre de 2011

Ave Fénix, símbolo de renacimiento

 

Ilustracion fénix 2

La imagen del Fénix, ave legendaria ha simbolizado para antiguas culturas y hasta nuestros días el eterno ciclo de vida-muerte-resurrección, el cual trasciende a la inmortalidad. El significado de su mitología fue asimilado por importantes religiones e inspirado partituras, danzas y hasta aparece como referente en películas tan contemporáneas como Harry Potter, dónde la mítica ave nombra a la orden de magos que representan la defensa contra el mal.

Se le conoce inicialmente como un ave con figura de garza muy importante en la simbología, muy difundida como esencia del complejo de ideas de inmortalidad y resurrección. Su nombre se remonta a la palabra griega que designa el color rojo del fuego, en relación con la leyenda de su resurrección de la llama purificadora. Benu Su origen en la sagrada ave benu (behnu) de los egipcios, una garza de color ceniza que fue la primera criatura que se posó en la colina primigenia que se originó del cieno y personificaba al dios Sol. En Heliópolis se la veneraba y se decía que solo aparecería cada 500 años. Mitógrafos antiguos ampliaron el relato con motivos nuevos.  El Fénix, se decía, solamente se nutre de rocío, luego vuela hacia lejana tierras donde recolecta hierbas aromáticas que amontona sobre el altar de Heliópolis, las enciende y muere quemada, reducida a ceniza. Pero tres días después resurge a una nueva vida. Ciertos mitos le atribuyen un plumaje dorado o multicolor.

Ilustracion fénix 1

En la Roma de la antigüedad, el Fénix se convierte en el símbolo de la fuerza vital continuamente renovada del imperio, y en ese sentido fue representada en monedas y mosaicos. Consecuentemente, los padres de la Iglesia consideraron esta ave un tipo simbólico del alma inmortal y de la resurrección de Cristo tras el reposo de tres días en el sepulcro. La iconografía cristiana suele representar al ave como el equivalente a un pelícano.

Pelícano-fénix

En el simbolismo alquímico el Fénix representa la destrucción y nueva formación de la materia prima en continua transformación en el camino hacia la piedra filosofal. En la iconografía de la antigua China se corresponde con el ave fabulosa Feng-huang, en la que se unen las dos cualidades primarias, yin y yang, como un todo a pesar de la dualidad. Con ello también es un poderoso símbolo de la comunidad matrimonial.

Feng-huang

Las leyendas judaicas llaman al Fénix "Milcham" y su inmortalidad se explica de la siguiente forma: Cuando la primera madre Eva se declaró culpable por haber comido del árbol prohibido, se adueñó de ella la envidia al ver que las otras criaturas no tenían pecado y sedujo a los animales para que también ellos comieran del "fruto prohibido". Solamente el ave Milcham no quiso escucharla y en recompensa por ello el ángel de la muerte recibió el mandato divino de que el ave obediente no sufriera la muerte. Milcham recibió una ciudad fortificada en la que viviría cada mil años sin ser molestado. "Mil años son los años de su vida, y cuando han transcurrido, sale de su nido un fuego y quema a las aves. Solamente queda un huevo, pero éste se convierte en un polluelo, y el ave sigue viviendo. Otros dicen que cuando cumple los mil años su cuerpo se encoje y sus ala pierden las plumas, de suerte que vuelve a ser un polluelo. Entonces su plumaje se renueva y el ave remonta el vuelo como una águila y jamás se ve asaltada por la muerte.

Fuente: Diccionario de símbolos. Hans Biedermann

domingo, 18 de septiembre de 2011

Adán y Eva vistos por Diego Rivera

 

La creacion Diego Rivera

"La creación" (detalle) 1922-1923 técnica mixta, encausto y collage con añadidos de oro.

La creación fue el primer mural que el gran artista mexicano realizó para la sala grande de Escuela Nacional Preparatoria en Ciudad de México. Posteriormente transformada en teatro. Esta obra refleja la experiencia adquirida en Europa cuando entra en contacto con la pintura antigua (mosaicos bizantinos, frescos medievales y renacentistas) y la moderna (desde Cézanne hasta los cubistas).

La imagen, detalle del lado izquierdo del fresco, representa a Eva como una mestiza rodeada de alegorías de la Danza, la Música, el Canto y la Comedia. A su derecha, aparece Adán, retratado también como mestizo y rodeado de una serie de mujeres que encarnan a la Fábula, el Conocimiento, la Poesía Erótica, la Tradición, la Tragedia, la Prudencia, la Justicia, la Fortaleza, la Continencia y la Ciencia.

jueves, 8 de septiembre de 2011

Joyas únicas de Elizabeth Taylor tesoros con historia

 

La colección de joyas de Elizabeth Taylor, un verdadero tesoro acumulado a lo largo de toda su vida, la mayoría obsequios de sus maridos, en especial del actor Richard Burton, quien le regalo piezas de gran valor tanto como objetos preciosos como por la historia que involucran será vendida en subasta el próximo diciembre de la mano de Christie's en Nueva York. A continuación los ítems más significativos:

La peregrina

“La peregrina” perla de principios del siglo 16, engastada en collar de rubí y diamantes y perlas de Cartier, fue un regalo de Richard Burton. Para saber más de esta joya haz clic aquí

Diamante ET

Anillo de diamantes obsequio de Richard Burton, con 33.19 quilates es una de las piezas de mayor valor de salida en subasta. Se estiman 2 millones de dólares como mínimo.

Foto 08-09-11 01 09 59 p.m.

Broche “Príncipe de Gales” adquirido por la actriz en subasta de las joyas de Wallis Simpson, duquesa de Windsor.

Foto 08-09-11 01 08 51 p.m.

Collar de esmeraldas y diamantes elaborado por BVLGARI. Regalo de Richard Burton.

Foto 08-09-11 01 08 16 p.m.

Taj Mahal 1627 - 1628, en una cadena de oro y rubíes de Cartier, fue un regalo de Richard Burton para su cumpleaños número 40 en 1972.

 

La colección entera llega a 300 piezas, las cuales tienen un valor estimado de 30 millones de dólares. Es muy posible que ésta cifra se supere, dada su procedencia y riqueza. Sumada a la indudable atracción que implica haber pertenecido a la legendaria actriz de los ojos violeta.

Fuentes: www.elpais.com / http://www.telegraph.co.uk/